viernes, 26 de marzo de 2010

LA LASTRA

-Curro, como’n esta semana ha’bío tan pocas cosas de las c’alegrase, er ésito d’Obama, m’ha paresío a mí, c’ha compensao a to lo demás.
-Cóntem’osté, paisano, de qué iba’r asunto.
-¿No s’acuerd’usté? Jase varias semanas l’hablamos; a propósito de la reforma sanitaria que proponía er presidente de EE.UU, y que se la’scharon p’atrás en er congreso.
-Ya m’acuerdo. Que casi las tres cuartas partes de los mericanos no tién sistensia méica.
C’a mí, como visitás la consurta de jesos señores, me trae ar fresco, pos qué quié osté que le diga.
-Sí, pae. Pos c’usté es una persona mu saludable. Pero, en er país más poderoso de la tierra, er año pasao, ocho millones se pusiero’nfermos y murieron, sin tenés a un méico que llevas’ar cuerpo.
-Sin tenés un méico, ¿ni a naide que mos llevaran a urgensias?
-Si’r asunto, Curro, no es: no podés ir ar méico; se trata de no tenés, pa pagaslo. Allí, cuesta un güevo entrás en una consurta. Y que sep’usté, que sólo la mitá der país se los pué costeás; algunos, con muchas fatiguitas: una pólisa de seguros. Na má.
-Sipote, que complicao mos lo pon’osté, paisano. Y, así, ajora, ¿en c’ha quedao to?
-Pos mir’usté, c’ha ganao una nueva votasión. Con la que se librará er dinero pa cubrís l’asistensia de to´r que no tenga medios.
-Jeso, qué supondrá: ¿má’mpuestos?
-Qué quié usté, Curro. Un país que derrocha en armamento pa’nseñasle los dientes, históricamente, a to’r que se le ponga’nfrete, como que se me jase difísil, consideráslo. Ya va siendo hora, ar cabo de tantos años, que le presten atensión a un sistema de salús público. Ahora, subirán los impuestos, o lo quitarán d’otras partías, comprando menos misiles.
-Po’stá osté listo, si cree c’allí se van a conformás. Miéo, me dá Obama. Cómo no ahorren, p’otro lao…
-Mir’usté, pos a lo mejós lo jasen. La verdad, es qu’estos días, los republicanos jestán subiendo pos las paeres. Pero er presidente s’ha cresío, y dise c’ahora va por los que contaminan la naturalesa, vamos, que quié más respeto ecológico, si no a pagás, que le vendrá mu bien a l’arcas. Hay que cumplís con la ley, sobre to, las petroleras.
Y aquí, Sapatero, ha tratao con las comunidades autónomas, un compromiso p’ahorrás dos mil millones, gastando menos en los dos prósimos años.
-Osté, ¿se lo piensa jeso, de los políticos?
-Curro, siempre s’ha dicho c’a la fuers’ahorcan.
-Pos, pa los políticos, gastás es fásil, paisano, pero resibís menos dinero, no sé cómo lo ve osté; yo, como santo Tomás: si no lo veo, no lo creo.
-Bueno, pos lo pronto, Griñán, s’ha quitao d’enmedio dos consejerías. Y jeso, es un dinerito, Curro.
-Ya veremos, paisano; no las tengo yo toas conmigo. Osté sabe, la señora Aguirre, ha puesto a lo’ndaluses de aves de corral, moviéndose na más, pa picoteás las migajas qu’lechan der PER, como a los paraos der campo.
-Pos la tal, Curro, se debería dar un paseíto por argunas de nuestras universidades, hospitales, y empresas, como las que ya comentamos jase unas semanas, a ves si en su comunidá madrileña tién er mismo nivés.
-Osté, no va a negás, c'aquí somos l’úrtimos en er llamado produsto interiós bruto.
-No l’haré, porqu’eso es una tara histórica c’arrastramos, no por curpa de los políticos d’ahora. Si queremos sés justos, Curro, con nosotros mismos, no orvidemos que desde los reyes católicos, jestas tierras han servio na más que pa sés espoliás pos los señores feudales que l’ocuparon.
-¡Ojú!, paisano, si se me v’osté tan p’atrás, ahí me coge en un renunsio.
-No es jeso, lo que yo quiero desil’usté, es qu’en menos de cuarenta años seguidos, que llevamos de democrasia, no s’ha podido arreglás tós los desequilibrios históricos produsidos en siglos. Pero argunos, sí.

-Pos jay c’apretás er paso, si no podemos perdés er tren de la historia. Yo mientras me queo con mi chicuela d’aguardiente de mostro pueblo…, ya sab’osté, paisano.

viernes, 19 de marzo de 2010

-Pués al PP, habrán comprobado, la subida del IVA no le ha sabido muy bien.
-Rafalita, ni a mí. Y seguro c’ha Curro tampoco, ¿verdad, pae?
-Osté sabe, paisano, lo que pienso yo de lo’mpuestos. Pero, a Sapatero, les gusta sacar los cuartos a los demás, p’haser uso d’ellos como pólvora der rey.
-Jesa, es su etesna opinión. Y la mía, c’habiendo votao la mayoría de la gente, en las jurnas, a unos políticos progresista en asuntos sosiales, lo suyo es jaser pagar impuestos a los que más tién. Lo demás son gaitas. Caso, ahora, der IVA.
-Pos yo, como los políticos me paesen tós iguales, dejás jese asunto en sus manos, lo veo una temeridás.
-Pues no van a tener ustedes que estar muy preocupados, en Madrid, van a declararse en rebeldía para no pagar. Eso dice la presidenta de la Comunidad.
-Jesa señora, Rafalita, no’s conssiente de lo que dise.
-En democrasia, paisano, los siudadanos tién derecho a discrepás ante las leyes injustas.
-Mir’usté, Curro, leyes injustas o no, si entran en vigós en nuestro país, es por su aprobasión en er parlamento. Y jeso, es una ley c’hay que cumplís.
-¿Y no se pué protestás? ¡Pos, vaya democrasia!
-Protestás, sí, pero declarasé en rebeldía, es no cumplís, pagando rigurosamente.
-La custión, paisano, es que te sacan los cuartos, y a jodese.
-Es lo que tié la ley. To’r mundo a cumplisla, y si no pué pasá lo que ar presidente de la patronás, c’ha tenío er gobierno que intervenisle la compañía de seguros, pos s’había quedao hasta sin er número de teléfono, mir’usté por donde, p’atendés a lo clientes.
-Pa que dig’osté que lo’mpresarios tién la pasta.
-Curro, se sabe que la que no tié dónde caese muerta es l’ampresa de seguros, pero l’assionistas no significan que no lo tengan.
-No diga osté pegos, paisano, si to’r mundo jestá tieso. Qué van a tenés, ni van a tenés.
-Dígaselo, usté, jeso, a lo’mpleaos de Air Comet, que s’han quedao sin cobrás pos la descapitalisasión que l’han jecho. Vámos, sin un duro, Curro.
-Si l’ampresa ha’ntrao en ruina, ¿qué dinero v’a tenés? ¿Osté se situa, o no?
-Me paese a mí, que quien jestá un poquito distraído es usté, pensando que’r dinero s’evapora; y no sabe c’hay po’r’ahí uno que tié un millón d’euros, que no’s moco de pavo, dispuestos p’aqués que diga dónde puén jestás los restos de la pobresita Marta der Castillo.
-¡Jesto es de locos!, paisano. Un sagento de puesto de la guardia sivís, y tó’sos pringaos verí’osté, como l’ancontraban.
-Estoy con usté, menos, en lo der sargento. Con tantos sientíficos polisiales, cómo es posible que no suerten prenda, jesos desarmaos.
-Que to’stá manga por jombro; jesos despachos de ladrones de cuello blanco que forman er caso Ballena Blanca; las mafias rusas disfrutando der sol en nuestras costas. Qué sé yo… ¿osté no ve que detrás se vislumbran las figuras de políticos, jueses, polisías, y hasta sordaos sin graduasión?
-Que barbaridás, Curro, l’ha dao usté un repaso a tó dios, menos a Rordán, porque no s’habrá usté c’anda ya por ahí suerto.
-¡Otro, que tal! C’una pila de millones que se llevó, y n’han aparesío.
-Ér, se declara insorvente; es de suponés, Curro, c’argún sabueso der Estao estará’tento, pa vés pa dónde se deja ís, pa cogeslo con las manos en la masa.

-Sipote, qu’inosente me resurta, osté, paisano; pero bueno…, yo con mi chicuela d’aguardiente de nuestro pueblo, pues, ea.

viernes, 12 de marzo de 2010

LA LASTRA

-Ojú, cómo me dejé la siudad la semana pasá, Curro: estaba tomá pos un ejérsito de polisías.
-¿Se refier’osté ar sábado?, paisano. ¿Es que no sabí’osté tós los ministros d’esteriores uropeos que s’habían juntao aquí, pa consensuás.
-Sí; lo que yo no sabía es qu’eran tantos. Pa l’hostelería, gloria bendita.
-No, si en jeso, la cosa no fue má. Pero a vés quién lo paga; si v’a salís de muestro borsillo, vamos daos, paisano.
-Inversiones, Curro; jeso se llama invertís pa má’delante ostenés benefisios.
-Paisano, pos ¿a vés dónde caen jesos benefisios?, si to’r mundo jestá más tieso que’r deo san Juan.
-Er dinero no s’evapora, Curro. Arguien lo tié; y lo gasta viajando y jasiendo turismo. Y son gente que les gusta epatás, acudiendo a visitás los sitios c’aparesen en los medios de comunicasión.
-Pos ¡que se den prisa!; c’aquí ya, ni’r campo da josnales con la repetisión der diluvio’niversal qu’estamos padesiendo.
-Cierto, Curro, y más nieve. Er embalse más grande d’esta tierra, en nuestro pueblo, c’hasía décadas que no se llenaba, ya no pué más y la’stá sortando. Y er campo imprasticable: asitunas pos los suelos, naranjas, hortalisas, fresas, tó podrío; er ganao pa comés se tié que sumesgís en las lagunas que cubren los pastos… ¡Qué ruina! Y con tanta criatura que no tié a dónde acudís pa ganase la vida con unjosnal, ¿qué vamos a jasés?: ¡pos subís los impuestos!, y remediás lo que podamos, subsidiando a los qu’están tan en precario.
-Osté, pae, siempre dando la tabarra con lo mismo. ¡Y los terremotos ahí tós los días asustando a arguien!
-Ahora’n Turquía; y como es un país deprimido, con malas contrussiones, más muertos y más catástrofe. Jeso, además, con Chile que no para: ayés mismo, ¡toma ya! otro, aunque menos virulento.
-Pos, seguís ayudando no sé quién podrá: donde n’hay, no se pué sacás ; y lo’spertos, a la cresis no acaban de vesle salida.
-Y no la’ncontrarán, Curro, si lo’sinvergüensas que l’han provocao no se la buscan.
-Pos, hablás de sinvergüenzas es un femismo, paisano; aquí lo que conviene es ponesle nombres propios a las cosas.
-Jeso lo sabe to’r mundo, Curro. Los que mangonean er tinglao; que no son otros que los de siempre, mu listos pa lleváselo. Y además pos la cara, sin contribuís ar fondo común.
-Tonses, ¿pa qué queremos a la clase política que mos dirige?, ¿es que no le v’a pones coto a jesos granujas?
-La política no tié er braso tan largo, pa llegás al cubil donde jesa chusma s’esconde.
-¡Pos si que d’osté ánimos! No m’estraña qu’er propio ministro, conseje a los trabajadores contratás planes de pensiones pa tenés má ingresos cuando se jubilen.
-¡Sí!, Curro, como él y otros colegas der gabinete las tién, ¡hala!, a ponés más ricos a los ricos; jay que reconoser qu’er ministro tié menos imaginasión c’un piloto automático. ¡Como to’ste gobiesno! Pos no sale ahora la ministra d’economía disiendo que si lo llegan a sabés, n’hubieran eliminao er impuesto sobre’r patrimonio.
-Hombre, paisano; jeso no v’a tenés, ahora, la curpa der desaguisao.
-¿Cómo que no? ¿Usté, no sabe -no será pos mi curpa- que la justisia sosial estriba en mantenés una caja de compensasión, que cubra las prestasiones que se deben a los menos favoresidos?
-¿No lo voy sabés? ¿Pero, argún respiro d’impuestos tendrá c’habés?
-Curro, jeso’s mu fásis: creás riquesa; ésta produse puestos de trabajo, y éstos, nóminas pa que los trabajadores cotisen. Jése’r juego. ¡No le d’usté, más vuertas!
-Osté, to lo ve mos’ensillo, pero cuando no jay, no jay
-Er dinero estará en argún lao, ¿no? Pos que sarga y no sea tan cobarde: ¡sircule, sircule!
-Argunas veses, paisano, me pregunto quién le met’osté’sas ideas.
-Si jeso, Curro, lo sabe cuarquiera que lea’r diario.
-¿Er diario?: no, pae. Osté ya sabe…, yo con mi chicuela d’aguardiente de mostro pueblo, pos ea.

viernes, 5 de marzo de 2010

LA LASTRA

- …Por cierto, ya que han venido los dos: ¿estarán ustedes contentos, no? Ya anunció, por fin, el gobierno la subida de impuestos.
-Jeso, Rafalita: dígaselo aquí mi paisano, que se’stará recreando.
-Ni mucho menos, Curro, en jesos impuestos no era’n lo que yo pensaba. ¡Ay! Rafalita; er IVA, a mi entendés, e’r peós tributo pa los pobres. Primero, posqu’éstos serán l’únicos que los pagarán, y, segundo, c’otra vés crecerá la sirculasión de dinero negro.
-Tanto’mpuestos, tanto’mpuestos; y más doblás er spinaso lo c’hase farta en jeste país. Y menos protestás como Sapatero la semana pasá, en Londres, frente a los grupos finasieros, jechándole en cara sés los curpables de la cresis.
-Con lo profundo c’usté es, Curro; a la hora der dinero se me vuerve un simplón incorregible; jesos que denunsió Sapatero, son los trileros c’han traído este sinvivís de la crisis.
-Osté me dirá lo que quiera, pero si to’r mundo no mos atacamos er sinturón no sardremos d’ella, paisano.
-Po’r sinturón se lo podrá ajustar er que lo tenga, los demás aguantarán sujetándose los carsones pa no perdeslos.
-Yo se lo digo, paisano, posque, con tanto’mpuesto, la’mpresas acaban afisiás, ¡y tién que serrás!
-Jeso’s propaganda tósica, Curro, ¿o's c’usté no tié notisias d’empresas c’han terminao 2009, fasturando más, y aumentando la plantilla sosial.
-¿Dígam’osté una?
-Le pueo traés una lista. Y aquí en nuestra tierra, una de las más importantes, ¿s’entera usté? Una’mpresa de consurtoría TIC y servisios tesnológicos c’opera incluso pa l’estranjero. Jeso sí, Curro, con una jartá de sentido de la solidaridás, recortando porsentajes de benefisios empresariales. Jesos son lo’mpresarios que nesesita este pueblo.
-Y, ¿jeso cómo lo sab’oste? Paisano.
-¡En er diario!, Curro, jestá tó publicao.
-¿En er diario? Tonses, no m’estraña. Ambustes y más c’ambustes.
-Pos, Curro, ¿a vés s’usté va nesesitás una sarsa jardiendo con la vós de Dios, como Moisés, pa cre’n argo?
-Yo creo, osté. Pero, ¡en lo que veo!… Bueno, a veses ni’n jeso. Y veo mucho negosio serrao, y l’utónomos con una mano’trás y otr’alante. Mientra’r, gobierno, dando palos de siego, desmintiéndose los ministros unos a otros con declarasiones que van sortando con lo qu’ellos cren son solusiones.
-Usté sabe lo que pienso yo der gobierno; ahora desbordao con er paro, sin atrevese a ponés en marcha medidas recaudatorias drásticas que fasiliten los créditos que nesesitan la mediana y pequeña empresa. Y la oposisión, entreteniéndolo pa que esija a los cubanos que pongan orden con los presos políticos, o a Chávez descolocao der mangoneo que tié en Venesuela, como si fuesen a tenés allí mejós futuro con l’oligarcas de siempre.
-Hombre, paisano. Es qu’es mu grave dejás morís en huerga d’hambre a un preso. Jay que tomás medidas drásticas frente a la distadura, no digamos si ayu’a Eta .
-Protestás enérgicamente, Curro: desde luego. Pero la oposición querrá un bloqueo’n toa regla como er que tién todavía los yanquis. Y jeso, sab’usté, es dañar más ar pueblo.
-No sé cómo jay c’haserlo, pero argo jabrá c’hasé; digo yo, con jesa gente y tó lo que tié’nsima.
-Curro, ensima lo c’han tenío históricamente tós los paises de l’América hispana. Er pueblo cubano es er más curto a partís de la revolución, y hubiera sido er más desarrollao de no haber sido pos er bloqueo. Y de Venesuela, mejós que l’averigüe usté.
-¡Sí! Viviendo sometíos y sin libertás.
-¿Y qué libertás v’usté en Haití, o en Honduras, o en Guatemala, o República Dominicana, o Bolivia, Paragüay …? Pa qué voy a seguís, Curro. Dios no permita más terremotos qu’este c’habío ahora en Chile, pos lo menos en jeste siglo, si no usté dirá a dónde vamos a acudís.
-No me lo recuerd’osté, paisano. ¡Cuánta desgrasia, en tampoco tiempo! Primero Haití, y j’hora Chile. Pa jeso m’ostamos preparaos. Y, ensima la cresis.
-¡Sipote! Po’so tié arreglo, Curro, cobrándole impuestos a los qu’están gordos de tanto dinero como s’ha’mbuchao con sus pelotasos.
-Pos la’rganisasione’mpresariales jestán que se suben pos las paeres pos c’así no crearán n’un puesto de trabajo. Y pa er pasto anticresis no s’espera a nadie, paisano.
-No s’estrañe usté, Curro. Er PP s’han’terao qu’en la’ncuestas va ganás la’lessiones, y no quié sabés ná de ná, más que levitás posqu’éstas se selebren. ¿Le paes’usté poco?
-¿A mí?, paisano; ya sab’osté… con mi chicuela d’aguardiente de nuestro pueblo…, pos jeso.