LA LASTRA

-Rafalita, arguna mejora y’habrá usté notao. Porque la semana’mpesó, dando datos positivos d’enero respesto ar cresimiento de viviendas hipotecás, lo cuás quié desís que los Banco’stán sortando la guita. Argo es argo; un primés sisno, pa mirás la crisis d’otro modo.
-Por dios, que más quisiéramos aquí que haberlo notao. Ya era hora de alguna buena noticia, porque los últimos datos dicen que los españoles desde los meses finales del 2009, han dejao de tomar copas en los establecimientos del ramo, heciéndolo en casa; para ahorrar, sépalo usted.
-Jeso tié que vés con que lo’ntereses en’stos momentos, son los más bajos de la historia, y que, o lo prestan, o’r gobiesno tendrá qu’intervenís. Pero’stá to’r mundo tieso, paisano. Menos er prenda de Baleares, que y’han desidío imputáslo, pos los más de cuarenta millones c’han desaparesío.
-No tendría bastante con lo que cobraba, Curro. Y jeso, c’hasta fue ministro con Asnar. Ahora que la fiansa que la cascao er jués, si no s’ha llevao na, ¿dónde la v’a sacás?.
-Aquí, no jay na mejós c’un cargo, repartís –prevendas-, y aluego a recibís por bajo la mesa, paisano. ¡Pos, ver’osté, como la’ncuentra! Otro como Roldán; mos vamos a cubrís de gloria, con muchos notas d’éstos.
-Pos, ya, que no se fíen, Curro. Que de ve’n cuando, van cayendo, y se acaba’r chollo pa irse de rositas con los borsillos llenos.
-No sé qué desísl’osté. Los canes, a lo más que llegan, es, ja’nseñarse los dientes.
-Curro, no jay que sés tan eséstico. Tampoco es nuevo vés entrás en la cárces a los políticos. Con Felipe, los vimos; con Asnar, también. Por sierto, éste, ahora, va tenés que desís argo sobre er dinero que salió de la caja de tós lo’spañoles pa que le dieran la medalla d’oro der congreso americano, er de Bush, vaya; que s’acordará usté der numerito qu’hiso, er bigotitos.
-¡C’aluego no se la dieron! Tantos pegos... Después, si la gente mos cabreamos, y no quié sabés de los políticos…, vié lo que viene. Ahí ti’osté a los bárbaros de Moscú.
-Joé, Curro, tampoco se pas’usté. Er terrorismo es argo de locos que no tié que vés con c’haya políticos sinvergüensas suertos. Jesa lacra, desde que’r sionismo’mpesó, jase más sesenta años, tié a to’r planeta’sustao.
-A mí, mos gustaría, paisano, c’arguien me dijera cómo se pué ir cargao d’esplosivos, en una siudás modesna, y que naide lo deteste.
-Moscú, es un cosmos. Mucha gente, y ya no’siste la distadura der proletariao: to’r mundo vigilando a t’or mundo.
-Aquí, tampoco. Pos con la guardia sivís, y con Fransia más desente, la Eta ya no sabe dónde poné’r güevo.
-Toquemos maera, Curro, qu’esos bichos no duermen p’hasés to’r má que puéan.
-Sí; con tós, en estao d’alerta. Los que s’hayan ío de viaje’stos días de semana santa, volando, p’acá y p’allá, sobre to en l’aropuertos, les quea que pasás un quinario.
-Menos má, c’usté no viaja. Ni ar pueblo, vaya, a ves las cofradías. Ayés se perdi’usté ar Abuelito, que con tan buen tiempo, y’recorrío tan largo c’hase, estaban tós las calles empetás.
-Qué me v’a desí osté, paisano. Y su madre la señoa de la Soleá, con ér. Yo’r campo, m’iré con m’hijo’sta tarde, y allí’sta lunes.
-Est’año, también er miércoles santo fue una fiesta, con nuestro Pae de la Rosa y er Mayós Dolós, que sale de san Fransisco. ¡Ah!, y er domingo, pos primera ves, saldrá er Resusitao.
-Totás que’stos días, no cabrá un arfilés en er pueblo.
-Hombre, mucha gente, como’n tós laos. También muchos d’er pueblo se van a’tros sitios, Curro. Jasí, los que vién, pos los que van.
-No; si’r finás, lo de la cresis, v’hasés un camelo. Que viajás, cuesta, paisano.
-La gente, jase sus cuentas, y hoy pas y mañana gloria. C’a vivís que son tres días. Y en sierto modo, Curro, jeso es bueno. En moviéndose’r personás, dinerito que se gasta: y más gente que trabaja.

-Pos yo, paisano, como me coge ya mayós pa viajás, contribuyo con er aguardiente que me tra’sté der pueblo. Per’osté, no lo vaya disiendo por ahí.