viernes, 11 de noviembre de 2011

LA LASTRA

-No me dirán que la campaña electoral no ha empezado fuerte. Un cara a cara de Rubalcaba y Rajoy, que me gustaría saber cómo lo han visto ustedes.
-A servió, Rafalita, le gustó que Rajoy agarrase’r toro pos los cuesnos.
-No sé, Curro, usté se conforma con poco. Ya me hubiese gustao a mí veslo leés menos y sés más espontáneo y claro; y a Rubarcaba, argumentás más, tantas cosas por jasés.
-Paisano, yo pienso que Rajoy tie su pograma establesío, pa desarrollaslo con sus colaboraores cuando gane la’lessiones.
-¿Qué programa? Dasle dineros a las grandes empresas por ca puesto de trabajo creao.
-¿Y le paes’osté poco? ¿O’s c’así no se ataja’r sangrante chorreo de paraos?
-Yo, le digo a usté, Curro, c’así v’a sortás una pasta, y de disminuir er paro nada. Y, además, ¿de dónde v’a sacás los dineros que se nesesitan, si a lo’mpresarios les da por, irresponsablemente, aprovechás er chollo?
-¿Irresponsablemente, por qué? Con ello, lo qu’intentan jabaratás costos de produssión.
-Jeso’staría bien, si la gente tuviese argún dinero conqué comprás. Pero, tantos que perdieron er trabajo y er sussidio de desempleo, ¿de dónde?
-Ya, pero a tós, paisano, no se l’acabao’r seguro der paro.
-¿No? Po’scuche usté a los sindicatos, c'ar paso que vamos quea poco, si los responsables no nos sacan de la quiebra, en la que nos han metío los especuladores finansieros, imponiendo un nuev’orden produstivo. Y apartando de los gobiesnos a tanto defraudadores y gorfos, como por ejemplo Beslusconi.
-Sí, paisano pero jeso será’n Italia. A mosotros no mos afesta.
-Nos afesta, y mucho, Curro. La Banca’spañola, v’a salís más engachá que con Gresia. Y la sicosis que se’stiende pos l’Unión europea y, sobre el cubís de tramposos que’s la Borsa, v’arruinás, toavía más, las posibles salías que se’staban estudiando.
-¿O sea que, con las tuercas que l’han apretao a Gresia, como la curpable de to, n’ha servío de na?
-Lo que l’estoy disiendo. Aquí, los sesuos economistas, no ven pos ningún lao que’sto se vay’a empesás a componés antes der dos mís trese. Así que, Curro, o los que tien fortunas acaparás, aflojan y suertan lastre, o, a los que’stán tiesos, a vés quién los frena.
-Pos sí que vi’osté, ostimista’sta semana.
-Jes, lo c’hay. Y en Bruselas, no’stán por consentís, que dejemos corrés er agua sin ponés freno ar permanente incremento de paraos.
-Y qué quie c’hagamos, si la’mpresas no’ncuentran finansiasión y competitividá pa vendés sus produstos.
-Pos, vaya una cosa por delante: la gente desente no pue consentís c’unos desalmaos quieran acabás con er estao der bienestás, que bien sab’usté lo que costó arcansaslo.
-Paisano, yo pienso c’argún sacrifisio jabrá que jasés.
-Yo, tambien, Curro. Pero quién. ¿Sólo lo’mpleaos? No, mir'usté. Ellos solos no van a sés los que carguen con er muerto.
-Ya ver’osté, qué’s mejós: no tenés na que llevá’r bohío, o sedés argunos bienes sosiales, jasta que’sto mejore.
-No, pae. Son muchos lo’ntereses que’stán en juego. Aquí, lo que conviene jes sentase, y que los capitalistas de nuevo cuño asuman que deben negosiás con los trabajadores, cómo van a compensás y cuándo, los sacrifisios que les píen.

-Ya me gustaría a mí que jeso juese cuant’antes. Mientras, paisano, osté sabe, yo con mi chicuela d’aguardiente de mostro pueblo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario